La Dra. Yvette Farran es originaria de El Paso y trabaja como reumatóloga en UMC. Su madre es de Juárez, México, y su padre de Líbano; ambos se establecieron en El Paso, donde Yvette creció en el lado oeste de la ciudad y asistió a la Escuela Secundaria Coronado.
“Siempre quise ser doctora. Me encantaba mi pediatra y siempre me sentí muy atraída por el campo de las ciencias”, comentó Farran. “Durante la universidad, tuve la oportunidad de observar diferentes profesiones de cerca. Hubo una experiencia en particular que realmente me ayudó. Creo que esa fue la que me confirmó que quería ser médico, y eso me llevó hasta donde estoy ahora”.
Como reumatóloga, Farran trata a pacientes con afecciones autoinmunes, cuyas defensas están comprometidas y, por ello, comienzan a atacar su propio cuerpo.
“La artritis reumatoide es probablemente la condición más común que tratamos. Lo que me atrajo de la reumatología fue el hecho de poder aliviar el dolor de los pacientes, ayudar a controlarlo o, con suerte, llevar su enfermedad a la remisión”, explicó Farran.
Esta enfermedad puede causar deformidades en los dedos, muñecas y otras articulaciones. Farran se enfoca en prevenir esas deformidades y ayudar a que los pacientes puedan desenvolverse lo más normalmente posible.
Farran, quien realizó parte de su formación médica en Houston, se siente agradecida de poder atender pacientes en el área de El Paso, cerca de su hogar, evitando que tengan que viajar a través del estado para recibir tratamiento.
“Durante mi formación en Houston, atendí a varios pacientes que viajaban hasta allá para recibir atención médica… a 900 millas de distancia”, comentó.
Farran expresó su gratitud por haber podido regresar a El Paso para ayudar a los pacientes de UMC a evitar viajes largos, lejos de sus familiares y amigos, para recibir el tratamiento que necesitan.
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